Una dilución es una mezcla homogénea, uniforme y estable, formada por dos o más sustancias denominadas componentes. La sustancia presente en mayor cantidad suele recibir el nombre de solvente, y a la de menor cantidad se le llama soluto y es la sustancia disuelta. El soluto puede ser un gas, un líquido o un sólido, y el disolvente puede ser también un gas, un líquido o un sólido.
Una solución que contiene agua
como solvente se llama solución acuosa.
Si se analiza una muestra de
alguna solución puede apreciarse que en cualquier parte de ella su composición
es constante.
Entonces, reiterando, llamaremos
solución o disolución a las mezclas homogéneas que se encuentran en fase líquida. Es decir, las mezclas homogéneas que se presentan en
fase sólida, como las aleaciones (acero,
bronce, latón) o las que se hallan en fase gaseosa (aire, humo, etc.) no se les
conoce como disoluciones.
Las mezclas de gases, tales como
la atmósfera, a veces también se consideran como soluciones.
Las soluciones son distintas de
los coloides y de las suspensiones en que las partículas del soluto son de
tamaño molecular y están dispersas uniformemente entre las moléculas del
solvente.
Las sales, los ácidos, y las
bases se ionizan cuando se disuelven en el agua
Haciendo una disolución de agua
salina disolviendo sal de mesa (NaCl) en agua. La sal es el soluto y el agua el
disolvente.
Frecuentemente, uno de los
componentes es denominado solvente, disolvente, dispersante o medio de
dispersión y los demás solutos.
Los criterios para decidir cuál
es el disolvente y cuáles los solutos son más o menos arbitrarios; no hay una
razón científica para hacer tal distinción.
Se suele llamar solvente al
componente que tiene el mismo estado de agregación que la disolución; y soluto
o solutos, al otro u otros componentes. Si todos tienen el mismo estado, se
llama disolvente al componente que interviene en mayor proporción de masa,
aunque muchas veces se considera disolvente al que es más frecuentemente usado
como tal (por ejemplo, una disolución conteniendo 50% de etanol y 50% de agua,
es denominada solución acuosa de etanol).
En el caso de dos metales
disueltos mutuamente en estado sólido, se considera disolvente a aquél cuya
estructura cristalina persiste en la solución; si ambos tienen la misma
estructura (ej.: aleación|aleaciones paladio-plata), se considera disolvente al
metal que ocupa la mayoría de las posiciones en la estructura cristalina.
Soluto es aquel componente que se
encuentra en menor cantidad y es el que se disuelve. El soluto puede ser sólido, líquido o gas,
como ocurre en las bebidas gaseosas, donde el dióxido de carbono se utiliza como gasificante de las bebidas.
El azúcar se puede utilizar como un soluto disuelto en líquidos (agua).
Es el componente que cambia de fase cuando se
produce la disolución; también denominado cuerpo disperso
Solvente es aquel componente que
se encuentra en mayor cantidad y es el medio que disuelve al soluto. El solvente es aquella fase en que se encuentra la solución. Aunque un
solvente puede ser un gas, líquido o sólido, el solvente más común es el agua.
En una disolución, tanto el soluto
como el solvente interactúan a nivel de sus componentes más pequeños
(moléculas, iones). Esto explica el carácter homogéneo de las soluciones y la
imposibilidad de separar sus componentes por métodos mecánicos.
Solvente: Es el componente que
disuelve, teniendo la propiedad de disolver ciertas sustancias.
Características de las soluciones
(o disoluciones):
Son mezclas homogéneas: las
proporciones relativas de solutos y solvente se mantienen en cualquier cantidad
que tomemos de la disolución (por pequeña que sea la gota), y no se pueden
separar por centrifugación ni filtración.
Sus componentes sólo pueden
separase por destilación, cristalización, cromatografía.
Sus componentes no pueden
separarse por métodos físicos simples como decantación, filtración, centrifugación,
etc.
La disolución consta de dos
partes: soluto y solvente.
Cuando la sustancia se disuelve,
esta desaparece.
Al disolver una sustancia, el
volumen final es diferente a la suma de los volúmenes del disolvente y el
soluto.
La cantidad de soluto y la
cantidad de disolvente se encuentran en proporciones que varían entre ciertos
límites. Normalmente el disolvente se encuentra en mayor proporción que el
soluto, aunque no siempre es así. La proporción en que tengamos el soluto en el
seno del disolvente depende del tipo de interacción que se produzca entre
ellos. Esta interacción está relacionada con la solubilidad del soluto en el
disolvente.
Las propiedades físicas de la
solución son diferentes a las del solvente puro: la adición de un soluto a un
solvente aumenta su punto de ebullición y disminuye su punto de congelación; la
adición de un soluto a un solvente disminuye la presión de vapor de éste.
Sus propiedades físicas dependen
de su concentración:
Las propiedades químicas de los
componentes de una disolución no se alteran.
Sus componentes se separan por
cambios de fases, como la fusión, evaporación, condensación, etc.
Tienen ausencia de sedimentación,
es decir, al someter una disolución a un proceso de centrifugación las partículas
del soluto no sedimentan debido a que el tamaño de las mismas son inferiores a
10 Angstrom ( Å ).
Se encuentran en una sola fase.
SOLUBILIDAD
La solubilidad de un compuesto en
un solvente concreto y a una temperatura y presión dadas se define como la
cantidad máxima de ese compuesto que puede ser disuelta en la dilución. En la
mayoría de las sustancias, la solubilidad aumenta al aumentar la temperatura
del disolvente. En general, la mayor solubilidad se da en disoluciones cuyas
moléculas tienen una estructura similar a las del solvente.
Ejemplo
A continuación se presenta un
cuadro con ejemplos de disoluciones clasificadas por su estado de agregación
donde se muestran todas las combinaciones posibles:
Por su concentración
Estos vasos, que contienen un
tinte rojo, muestran cambios cualitativos en la concentración. Las disoluciones
a la izquierda están más diluidas, comparadas con las disoluciones más
concentradas de la derecha.
Por su concentración, la
disolución puede ser analizada en términos cuantitativos o cualitativos
dependiendo de su estado.
DILUCIONES SERIADAS
Hay muchas situaciones en que las
cantidades de sustancia necesarias para ver un efecto son extremadamente
pequeñas (por ejemplo un fármaco para tratar una enfermedad, una hormona para
estudiar su efecto en un animal de experimentación, etc) y difícilmente se
pueden pesar o medir en esas proporciones tan pequeñas. En esas situaciones es
necesario recurrir a la preparación de una solución de alta concentración (o
solución de stock o solución madre) y hacer diluciones seriadas a partir de
ésta.
Mayor o menor concentración
Ya dijimos que las disoluciones
son mezclas de dos o más sustancias, por lo tanto se pueden mezclar agregando
distintas cantidades: Para saber exactamente la cantidad de soluto y de solvente
de una disolución se utiliza una
magnitud denominada concentración.
Dependiendo de su concentración,
las disoluciones se clasifican en diluidas, concentradas, saturadas, sobresaturadas.
Diluidas: si la cantidad de
soluto respecto del solvente es pequeña.
Ejemplo: una solución de 1 gramo de sal de mesa en 100 gramos de agua.
Concentradas: si la proporción de
soluto con respecto del solvente es grande.
Ejemplo: una disolución de 25 gramos de sal de mesa en 100 gramos de agua.
Saturadas: se dice que una
disolución está saturada a una determinada temperatura cuando no admite más
cantidad de soluto disuelto. Ejemplo: 36
gramos de sal de mesa en 100 gramos de agua a 20º C.
Si intentamos disolver 38 gramos
de sal en 100 gramos de agua, sólo se disolvería 36 gramos y los 2 gramos
restantes permanecerán en el fondo del vaso sin disolverse.
Sobresaturadas: disolución que
contiene mayor cantidad de soluto que la permitida a una temperatura
determinada. La sobresaturación se produce por enfriamientos rápidos o por
descompresiones bruscas. Ejemplo: al sacar el corcho a una botella de refresco
gaseoso.
Disoluciones cualitativas
También llamadas disoluciones
empíricas, esta clasificación no toma en cuenta la cantidad numérica de soluto
y disolvente presentes, y dependiendo de la proporción entre ellos se
clasifican de la siguiente manera:
Disolución
diluida: es aquella en donde la cantidad de soluto que interviene está en
mínima proporción en un volumen determinado.
Disolución
concentrada: tiene una cantidad considerable de soluto en un volumen
determinado.
Disolución
insaturada: no tiene la cantidad máxima posible de soluto para una temperatura
y presión dadas.
Disolución
saturada: tienen la mayor cantidad posible de soluto para una temperatura y
presión dadas. En ellas existe un equilibrio entre el soluto y el disolvente.
Disolución
sobresaturada: contiene más soluto del que puede existir en equilibrio a una
temperatura y presión dadas. Si se calienta una solución saturada se le puede
agregar más soluto; si esta solución es enfriada lentamente y no se le
perturba, puede retener un exceso de soluto pasando a ser una solución
sobresaturada. Sin embargo, son sistemas inestables, con cualquier perturbación
el soluto en exceso precipita y la solución queda saturada; esto se debe a que
se mezclaron.
Disoluciones valoradas
A diferencia empíricas, las
disoluciones valoradas cuantitativamente, sí toman en cuenta las cantidades
numéricas exactas de soluto y solvente que se utilizan en una disolución. Este
tipo de clasificación es muy utilizada en el campo de la ciencia y la
tecnología, pues en ellas es muy importante una alta precisión.
Existen dos tipos de disoluciones
valoradas:
• Porcentual
• Molar
Modo de expresar las concentraciones
Ya sabemos que la concentración
de las soluciones es la cantidad de soluto contenido en una cantidad
determinada de solvente o solución. También debemos aclarar que los términos
diluidos o concentrados expresan concentraciones relativas.
Las unidades de concentración en
que se expresa una solución o disolución pueden clasificarse en unidades
físicas y en unidades químicas.
Unidades físicas de concentración
Las unidades físicas de
concentración están expresadas en función del peso y del volumen, en forma
porcentual, y son las siguientes:
a) Tanto por ciento peso/peso
%P/P = (cantidad de gramos de soluto) / (100 gramos de solución)
b) Tanto por ciento
volumen/volumen %V/V = (cantidad de cc de soluto) / (100 cc de solución)
c) Tanto por ciento peso/volumen
% P/V =(cantidad de gr de soluto)/ (100 cc de solución)
a) Porcentaje peso a peso (%
P/P): indica el peso de soluto por cada
100 unidades de peso de la solución.
b) Porcentaje volumen a volumen
(% V/V): se refiere al volumen de soluto
por cada 100 unidades de volumen de la solución.
c) Porcentaje peso a volumen (% P/V): indica el número de gramos de
soluto que hay en cada 100 ml de solución.
Excelente aporte, este blog es muy completo.
ResponderEliminar